Los desecantes SUPER DRY eliminan eficazmente la humedad del interior de los envases y embalajes. Mantienen las mercancías secas y a salvo de daños por humedad. Las bolsas desecantes SUPER DRY están diseñadas para absorber la humedad del aire, reduciendo así la humedad en un entorno controlado como bolsas de polietileno, cajas de cartón y contenedores.
Durante el transporte o el almacenamiento, la humedad puede penetrar en los contenedores y en los envases de los productos. Los cambios bruscos de temperatura, habituales durante el transporte marítimo, aumentan los riesgos de lluvia en los contenedores o de transpiración de la carga, lo que puede provocar corrosión, productos infectados de moho, mal olor y envases aplastados y colapsados. Para evitar esos riesgos inducidos por la humedad en cualquier tipo de carga, es esencial tomar medidas preventivas que garanticen que la mercancía llega a su destino en perfectas condiciones.
En comparación con los tipos de desecantes clásicos de gel de sílice y arcilla, los desecantes SUPER DRY proporcionan la seguridad necesaria frente a los daños causados por la humedad durante los envíos marítimos intercontinentales prolongados.
Los desecantes SUPER DRY tienen una capacidad de absorción verificada de más del 300% de su peso en seco y absorben la humedad de forma continua hasta 90 días en condiciones de temperatura que oscilan entre -5°C y +90°C.
Mientras que la capacidad de adsorción del gel de sílice y la arcilla se limita a entre el 25% y el 40% de su peso en seco, alcanzando el punto de saturación entre 3 y 7 días después de la aplicación con un rango de temperatura de aplicación limitado a entre 15°C y 30°C. Por lo tanto, el gel de sílice o los desecantes de arcilla no proporcionan una protección suficiente contra los daños causados por la humedad durante el transporte marítimo.
Los desecantes SUPER DRY absorben 10 veces más humedad que el gel de sílice o la arcilla y son aplicables en un rango de temperaturas más amplio. Los desecantes SUPER DRY son la solución superior para la prevención de daños por humedad en el interior de contenedores, cajas de transporte y embalajes de productos. Mantienen su carga perfectamente a salvo de los riesgos de daños por humedad.